Con independencia del derecho de residencia previsto para las personas que no ejercen una actividad económica, los ciudadanos de la Unión Europea y sus familiares tienen derecho a permanecer en Suiza al alcanzar la edad de jubilación si acreditan un período previo de residencia de 3 años y de 12 meses de trabajo en el momento de solicitar la jubilación.
Muchas veces sin embargo, los trabajadores españoles que se jubilan se plantean el retorno a España, ya que la vida suele ser más económica allí y aprovechan mejor sus rentas de jubilación. Al contrario, entre los argumentos que suelen motivar la continuidad en Suiza está la cercanía con los hijos y sobretodo los eventuales nietos, así como la calidad de servicios como la sanidad.
También tienen derecho a permanecer en Suiza los españoles que sufran una incapacidad permanente si hubieran residido en Suiza durante los 2 años precedentes o que se encuentren permanentemente incapacitados por haber sufrido una enfermedad profesional o accidente y tengan derecho a una pensión del seguro suizo. Este mismo derecho lo tienen los familiares que conviven con el trabajador.